Un buen corazón
La razón -amigo mío- sí, sólo la razón debe advertirnos que perjudicar a nuestros semejantes no puede jamás hacernos felices, y nuestro corazón, que contribuir a su felicidad es lo mas grande que la naturaleza nos haya dado en la tierra. Toda moral humana se encierra en esta sola frase: hacer a los demás tan felices como uno mismo desea serlo, y no causarles nunca un mal que no quisiéramos recibir. Estos son, amigo mío, estos son los únicos principios que debemos seguir y no hay necesidad de religión ni de dios para apreciarlos y admitirlos: Sólo se necesita un buen corazón. Marques de Sade, del libro: "Diálogo entre un sacerdote y un moribundo". Fue un buen amigo, me dijo la prima señalando el cuerpo sin vida de nuestro desafortunado amigo. "Noooo" , respondió la tía de mi esposa. "Como se les ocurre decir eso, era gay y para completar ateo, no iba a misa, no creía en Dios, por algo se murió" . sentenció con sus habituales comentarios ponzoñosos y vene